No me acuerdo de lo que te quería decir
"No me acuerdo de lo que te quería decir” nace del insomnio prominente de los domingo por la noche. Pensamientos, verborrea mental, monólogo interior, memorias, líneas de canciones que he escuchado y líneas de libros que he leído, me atraviesan la mente de forma instantánea, casi violenta. Me cuesta trabajo llevarles el ritmo, descifrarlos, entenderlos y darles espacio. Aquí presento un leve pero compulsivo intento por organizar esta información. En esta compulsión por registrar, nombrar, escribir y entintar devienen imágenes en donde el texto soez, fluido e inconsciente genera figuras que le agregan un peso y significado distinto al verse envuelto dentro de éstas. Uso el texto como generador y creador de imágenes y uso a las imágenes como un activo para potencializar, suavizar, contradecir y manipular el mensaje mismo. El texto funciona como elemento principal del dibujo y la imagen es el resultado directo de la escritura.
El artista Tsang Kin-wah, en las notas sobre su proyecto “Interior”, menciona cómo imagen y texto son dos estructuras distintas de representación. Una es pictórica, visual y abierta a interpretaciones, mientras que el texto, funciona como una guía para dirigir al lector a percibir e interpretar el significado de cierta manera. Tomando como parteaguas el discurso de Kin-wah, “No me acuerdo de lo que te quería decir” funciona como una invitación para que la audiencia se relacione con el lenguaje y la imagen de una forma completa e íntegra. No como dos esferas que funcionan en distintos niveles de interpretación. Sino más bien, desde la completud, desde un diálogo que se establece entre las dos estructuras visuales. Es un intento por materializar fragmentos del espacio interior que se producen de forma intangible. El título responde a esta misma pulsión de la velocidad de pensamientos y de verborrea mental.